No hay burbuja inmobiliaria general en España, pero sí tensiones regionales por demanda extranjera, alquiler turístico y escasez de oferta.
- lizcoello62
- 14 nov
- 1 Min. de lectura

La principal conclusión es que España no está ante una nueva burbuja inmobiliaria como la de 2008, aunque sí existen tensiones localizadas en ciertas regiones.
Entre los factores que elevan los precios están:
Demanda extranjera intensa en zonas como Baleares, Canarias, Alicante, Málaga y Madrid.
Dinámicas especulativas ligadas al alquiler turístico y a la inversión con fines de rentabilidad.
Compras al contado por parte de inversores y particulares con alta capacidad financiera, lo que excluye a jóvenes y familias con ingresos medios.
El estudio destaca que los precios residenciales crecieron más del 10% interanual en el segundo trimestre de 2025, y el esfuerzo hipotecario se acerca a niveles de 2006-2007. Sin embargo, el 66% de las sociedades de tasación y el 75% de los expertos externos consideran que la demanda sigue siendo solvente, con compradores más prudentes y condiciones de financiación más estrictas que antes de la crisis de 2008.
En cuanto al mercado del alquiler, se prevé que los precios sigan subiendo. En septiembre de 2025, el alquiler medio alcanzó los 14,5 €/m², con un incremento anual del 10,9%. Ciudades como Madrid, Sevilla, Alicante, Barcelona y Palma registran máximos históricos. Los expertos anticipan subidas anuales de entre el 9% y el 15%, impulsadas por la escasez de oferta y el trasvase de demanda desde la compra.
Para mejorar el acceso a la vivienda, los expertos proponen:
Incrementar la oferta mediante construcción de vivienda nueva para alquiler y movilización del parque vacío.
Reforzar la seguridad jurídica para arrendadores.
Impulsar la colaboración público-privada.
Diseñar políticas de suelo y financiación a medio y largo plazo.
Fomentar ayudas públicas como avales, subvenciones o hipotecas específicas para jóvenes.








Comentarios