La Ley de Vivienda, aprobada en marzo de 2023, tenía como objetivo principal aumentar la oferta de vivienda asequible en España y mejorar las condiciones de acceso a la misma. Un año después de su entrada en vigor, ¿Cuáles han sido sus efectos?
El principal impacto de la Ley ha sido la caída de la oferta de viviendas en alquiler. En el último año, la oferta de alquileres permanentes ha disminuido un 15%, mientras que los alquileres temporales han aumentado un 56%, llegando a suponer hasta el 11% del mercado.
Esto ha provocado que los precios del alquiler suban. El precio medio de una vivienda en alquiler en España ha subido un 10% en el último año, situándose en los 1.002 euros mensuales. Para este 2024, se espera que los precios sigan subiendo, ya que a comienzos de año ya alcanzaba una media de 1.069 euros/mes de renta media.
La Ley también ha tenido otros efectos, como la limitación del alza del precio del alquiler en grandes tenedores al 3% en 2024, la ampliación del plazo de los contratos de alquiler de 5 a 7 años y la creación de un nuevo índice de referencia para los precios del alquiler.
En general, la Ley de Vivienda ha tenido un impacto positivo en algunos aspectos, como la limitación del alza del precio del alquiler y la ampliación del plazo de los contratos. Sin embargo, su principal objetivo, aumentar la oferta de vivienda asequible, no se ha cumplido, lo que ha provocado un aumento de los precios del alquiler.
En definitiva, la Ley de Vivienda ha sido un primer paso en la dirección correcta, pero todavía queda mucho por hacer para garantizar el derecho a la vivienda en España.
Comments